serpenteantes caminos

Serpenteantes caminos

Serpenteantes caminos, sinuosos e interminables. Situaciones que no se resuelven. Furiosos, emprendemos la lucha, nos resistimos a la situación, desconfiamos del camino.

«Sólo el sabio sabe cómo hacer que funcionen las cosas en nuestro mejor interés; es modestia mantener la mente abierta, y reconocer que el serpenteante camino de lo creativo es por el bien de todos, mientras que el camino recto creado por nuestro ego sirve sólo para nuestro reducido interés, y muchas veces, en detrimento de otros.» (Carol K. Anthony)

MANIPULANDO Y FORZANDO LA SITUACIÓN

La cultura occidental nos enseña que para lograr nuestros objetivos debemos desplegar todo nuestro ingenio, influir en los demás, o forzar la situación para que sucedan los acontecimientos que creemos necesarios.

Al hacerlo nos desligamos de nuestra verdad interior y seguimos la voz chillona de nuestro pequeño ego, que protesta porque las cosas no son fáciles y cómodas.

CUANDO HEMOS PERDIDO LA BRÚJULA

Cuando llevamos tiempo recorriendo estos serpenteantes caminos podemos sentirnos como si hubiésemos perdido la brújula. Estamos desesperados.

Para entonces, recorremos el camino con uñas y dientes en vez de detenernos, sosegarnos y buscar la dirección a seguir en nuestro interior.

Puede que, incluso, hayamos llegado a pensar dar media vuelta y abandonar nuestras responsabilidades.

No debemos abandonar ahora, aunque nos hayamos distanciado de nuestra voz interior. Tenemos que desapegarnos de nuestras emociones y renovar nuestra determinación de seguir, aunque parezca que hemos esperado más del tiempo razonable para que las cosas mejoren.

ESCUCHANDO NUESTRO SER MÁS PROFUNDO

En lo más profundo de todos nosotros reside la verdad noble y sincera que alienta nuestra fuerza de vida. Contactar con su grandeza nos dará la fuerza necesaria para seguirla con alegría.

No es necesario planificar ni tramar nada. Todos los ingredientes que se necesitan ya están presentes.

Pese al temor de que los demás no nos entiendan y que lleguemos a aislarnos, o que perdamos la oportunidad de influir en una situación para mejorarla, es preciso confiar en el camino creado por el poder de lo creativo y caminar con humildad, pero con firmeza.

Os abrazo, María

Esta entrada tiene 2 comentarios

  1. Ana

    Gracias María, gracias, gracias, gracias.
    Un abrazo desde el corazón,
    Ana

Deja una respuesta