miedo al rechazo

Cómo superar el miedo al rechazo y ser tú mismo

¿Cómo hacer para actuar de manera íntegra, sin miedo al rechazo de los demás? Esta es una de las preguntas que nos hacemos al avanzar en el camino del autoconocimiento, ese sendero que, aparentemente, nos lleva muy lejos para, finalmente, devolvernos al encuentro con nosotros mismos.

SOLTANDO EQUIPAJE

¿Y qué sucede cuando te encuentras contigo mismo?

Pues que vamos soltando equipaje, ese al que nos aferrábamos al principio, considerándolo imprescindible, y que luego ya no nos es tan necesario.

Me refiero a las máscaras, los escudos, las armas, creados desde el minuto uno de nuestra vida para asegurar nuestra supervivencia y que conforman nuestra forma de interactuar y relacionarnos con los demás.

Esta «forma de ser» es la imagen que transmitimos de nosotros mismos, nuestra personalidad social, a la que nuestro entorno (familiar, laboral, social) está acostumbrado.

Es cómodo que sigamos siendo así.

Lo incómodo, lo que sobresalta, lo que desata la alarma, es que cambiemos.

MIEDO AL RECHAZO

Cuando el ser ficticio comienza a derrumbarse y contactamos con nuestra verdad interna, liberándonos de trabas propias y ajenas, impulsándonos a ocupar el lugar correcto y a seguir el propio camino…

…Entonces, puede que experimentemos el rechazo y la hostilidad por parte de los que nos rodean, incluso de los seres más queridos.

¿Cómo mantener la integridad bajo tamaña presión?

Vamos a ver cuáles son las fases para superar el miedo al rechazo y ser tú mismo.

EL ENFRENTAMIENTO

Al principio, por nuestra parte puede surgir el enfrentamiento.

Necesitamos pelear con uñas y dientes cada centímetro de nuestro recién reconquistado reino.

Vamos a gastar mucha energía en «explicarnos» y tratar de convencer a nuestros detractores.

¿Pero qué está ocurriendo? Pues que necesitamos también auto-convencernos a nosotros mismos de que el cambio es adecuado.

Porque dentro de nosotros también hay una vocecilla –la del ego– que clama por su supervivencia.

En el momento en que sintamos que no tenemos que dar más explicaciones habremos dado un gran paso.

Entonces, nuestra realidad interna estará comenzando a alinearse con nuestra realidad externa.

Dejaremos de resistirnos a lo que sucede y lo aceptaremos. Nos aceptaremos.

DESAPEGO DE LO EXTERNO

En esta segunda fase, estamos más serenos.  Aún cuando los demás siguen intentando frenarnos en nuestros propósitos, sabemos que es inútil derrochar nuestra energía en luchas y discusiones estériles.

Así que guardamos silencio, reservamos nuestras fuerzas y seguimos nuestro camino, dejando que la vida vaya poniendo las cosas en su sitio.

Porque la mejor forma de convencer es a través de nuestros actos.

SER TÚ MISMO

Al desapegarnos de lo que nos rodea y dedicarnos, con amor y entrega, a lo que nos dicta nuestra fuerza interior vamos a ir, poco a poco, elevando nuestra energía y atrayendo una realidad externa más favorable.

Cuando alcancemos ese nivel de vibración, llegará el momento de avanzar, de mostrarse, de presentarse ante el mundo, sin temer a las situaciones o relaciones difíciles.

Si creemos en nosotros mismos, y somos firmes en nuestra actitud, nos aceptarán.

¿Te ha ocurrido a ti? ¿Te has sentido rechazado cuando has cambiado tus creencias o tus hábitos? ¿Cómo has vivido este proceso? ¿Has conseguido no ceder a la presión y ser tú? Cuéntamelo como siempre un poco más abajo, donde dice «Deja un comentario».

Os abrazo, María

Esta entrada tiene 2 comentarios

  1. ssoteras

    Gracias por tus palabras. Un sincero abrazo.

Deja una respuesta